Saúl Hernández en Chicago: toda una mitología

Saúl Hernández en Chicago: toda una mitología

Como a los mexicanos nos atraen las paradojas, no hay nada más natural que Saúl Hernández, acérrimo crítico del malinchismo, se haya convertido, con el tiempo, en el mayor exponente del rock en México. La primera vez que supe de él fue en mi adolescencia, después de un concierto que Caifanes había dado en el Estadio Jalisco. Emulando el atuendo y peinado de Robert Smith, Saúl Hernández había salido a defender la identidad mexicana abriendo un concierto para Rod Stewart.

Lejos estábamos en ese entonces de imaginar que esa cómica animadversión llegaría a ser una de las relaciones más significativas para nuestra música: Saúl Hernández enarbola ahora la bandera del rock nacional ante las tribunas internacionales. Además, ya no tiene necesidad ni vergüenza de admitir su admiración por el talento extranjero. Entre sus artistas favoritos se encuentran algunos de los músicos británicos más emblemáticos, como David Bowie, Peter Gabriel y Morrissey, por mencionar sólo algunos.

La trayectoria de Saúl Hernández es extensa, y en ese recorrido ha ido dejando verdaderas joyas, de las cuales comentamos aquí sólo una.

A diferencia de El equilibro de los jaguares, que es una búsqueda y un rito entre las ruinas, Bajo el azul de tu misterio (disco 2) es un álbum de alturas y profundidades. Es un álbum de texturas etéreas y misteriosos ecos: en sus mejores canciones se adivina una pugna entre el ángel y el reptil que se resuelve en magia. La mística del título no es casualidad: entre los discos que Saúl Hernández ha liderado, Bajo el azul de tu misterio es quizá el menos político, y por eso el más mágico. En este disco, Hernández dejó al lado el estruendo del combate y se entregó al hechizo de la poesía. Este es un disco que aspira a tener alas, pero cuyas melodías nos remiten a profundas memorias acuáticas. Es el primer gran intento de introducir la poesía al rock mexicano y con ella elevarlo a la altura de cualquier otro en el mundo.

O quizá todo este rollo no sea más que el disparate de un cuarentón holgazán y melancólico. Un cuarentón que a quince años de distancia desempolva esas rolitas y las escucha con el entusiasmo y la añoranza de la juventud: la juventud, ese tesoro divino que se va para no volver, por citar caprichosamente a otro enorme bardo que nos entregó, en una sola palabra, Azul… toda una mitología.

José Ángel N. Autor de Illegal: Reflections of an Undocumented Immigrant. Blog. Para leer un fragmento de su libro Illegal, presione este enlace. 

♦ ♦ ♦

Saúl Hernández en House of Blues Chicago
Viernes 28 de febrero, 8pm
329 N. Dearborn  Chicago, IL 60654