El radiante arco iris de Juanita

El radiante arco iris de Juanita


Juana Iris Goergen

La primera vez que vi a Juanita fue hace diecisiete años en un frío diciembre. Recuerdo que nos conocimos en una intimidante lujosa suite de aquellas que se usan para entrevistar a los recién egresados doctores (Ph.D.), candidatos a los puestos de trabajo de profesores en universidades estadounidenses que se publican en el MLA, a la que todos llegamos algo nerviosos. Sin embargo, mi ansiedad pronto se diluyó al escuchar la dulce y amable voz de Juanita que me daba la bienvenida junto a sus colegas. Desde ese contacto inicial sentí su calidez humana, entendí su pasión por la escritura y literatura, y, supe que compartiríamos en complicidad muchos intereses en común como es nuestro amor por la poesía, el respeto a nuestras comunidades y el lugar de la mujer en nuestra sociedad, y la justicia social. Hoy después de dieciséis años que llevamos trabajando juntas, sé que no me equivoqué. Juanita es una colega, profesora y poeta ejemplar que irradia paz con su inteligencia y generosidad.

Juanita es especialista en estudios coloniales y post-coloniales de América Latina y enseña lengua, literatura latinoamericana, estudios latinos en Estados Unidos, estudios de la paz, y teoría crítica en DePaul University en Chicago. Como crítica literaria ha publicado: Literatura fundacional americana: El espejo de paciencia (1991), Heroínas del Bronx (historia oral, 1998) además de artículos y reseñas en libros y revistas de crítica literaria. En el año 2002 estuvo becada por la Fulbright ejerciendo su labor de investigación académica en la Universidad de Tübingen en Alemania. Juanita también se ocupa de trabajar en voluntariados con la comunidad latina de Chicago como es su labor con el Proyecto Odisea. Además es una reconocida poeta y cuenta con los poemarios: La sal de las brujas (1997, finalista del premio Letras de Oro), La piel a medias (2001) y Las Ilusas/Dreamers (2008), además de diversos poemas publicados en antologías como: Astillas de luz/Shards of Light (1998), Nosotros los otros (1996) Between the Heart and the Land/Entre el corazón y la tierra (2001), Generación (2001) Tameme (2001), Calabash (2002) y La Tinusa (2016). Ha editado cinco antologías del Festival Internacional de poesía en Chicago/Poesía en abril cuya importante labor de iniciadora y co-organizadora durante nueve años es invaluable. Tiene inéditos dos poemarios: La celda de Lilith y Perfil de un grito, y ahora se encuentra escribiendo el poemario: Mar de huesos.

La poesía de Juanita le da la voz a las mujeres para que cuenten sus historias, hablen de sus deseos y sueños y reclamen la igualdad. La poeta  nos dice que “los grandes poemas son incendios que se propagan por todas partes, iluminando sus consumaciones con estremecimientos de placer o de agonía” (La Tinusa 287).

 

LA LUPE: VOLADORA

                 Con su Orisha a la espalda
                        la Lupe canta.
                        Un temporal de aullidos
                        de ángeles infiltrados
                        encrespándose en ansias 

           Y allá donde se quiebran
           los collares de Ochún
           entre miel y algas rojas
           la negra se levanta.
           Y me rompe una voz la cabellera.
           Me mata un rayo.          

           Toda yo
           como un racimo desnudo de luz negra
           de nuevo mujerzota de pan recién nacido
           que a la luz de su voz
           sale de sus raíces y vuelve a ser con ella
           “la mala”
           la del cristal oscuro y las torres moradas
           furiosamente libres
           las arañas oscuras del pubis en reposo
           las rodillas
           los hombros.

           Borra todas las penas
           que revuelven los nombres
           y agujerando el giro
           con magia auricular va señalando curvas.

                 Con mi beso a la espalda,
                 la Lupe baila.

 

 

EVA: UTOPĺA DEL LENGUAJE 

La  culpa del culpable sin disculpa
no lo es. 

Disculpada es la culpa
si el culpable
no lo es. 

Y el peso de la culpa,
y el culpable,
y la disculpa
desaparecen,
si la inculpada descubre
que su culpa, nunca fue.

  

Gracias Juanita por iluminarnos todos los días con tu colorido arco iris.

 

Rocío Ferreira obtuvo el doctorado en literatura latinoamericana y estudios de género en la Universidad de California en Berkeley y es Profesora Asociada de Español y Directora del Programa de Graduados en Lenguas Modernas en el Departamento de Lenguas Modernas de la Universidad DePaul en Chicago.