Allá en San Fernando: entre las emociones y la reflexión

Allá en San Fernando: entre las emociones y la reflexión


Allán en San Fernando: J. Rochel, C. Escrich y L. Holguín en el papel de Salo, María y Judith. Foto: Carolina Sánchez

 

El teatro es conflicto, pero también es un juego de emociones. En Allá en San Fernando, la última obra de Raúl Dorantes, presentada por Colectivo El Pozo, los personajes sufren situaciones al límite, y eso obliga al actor a vivir circunstancialmente las mismas vivencias que sus personajes. El espacio del escenario, que efectivamente no muestra mucho para dar espacio al trabajo creativo, está preparado para ser ‘caminado’, para reflejar espacios y tiempos distintos. Eso es un acierto de la dirección y de la escenografía.

La complejidad de los personajes en casi todos los casos, se construye a través de una sicología simple, pero no por eso menos convincente. En una sociedad violenta, las situaciones extremas son cosas de todos los días, algo con lo que se convive a la espera de que finalmente nos toque vivirlas en carne propia. Los personajes de “Allá…”, al menos cinco de ellos están muertos, su búsqueda es la conciencia de saberse en esa condición para poder pasar ‘al otro lado’, ese otro lado que ofrece paz o redención, dependiendo de la óptica que uno quiera darle.

Los actores de “Allá…” han tenido la tarea de darles vidas a estos seres que deambulan en una especie de Purgatorio oscuro y sin fronteras, aunque algunos de ellos creen estar aún a sur del río Bravo. Su confusión se alimenta de los últimos dolores que la vida les ha causado: la ceguera, la renguera y manchas de sangre en todas sus ropas. Los personajes se sorprenden de su estado, un estado que no comprenden pero que lentamente empiezan a develar. La sorpresa, la indignación, la esperanza y la furia se nos presentan en los gestos de los actores con belleza trágica y con incertidumbre certera. Los actores hacen hincapié en esos juegos de emociones que deben transmitir para convencer al espectador de que son parte vital de la obra, pero no como participantes, sino como testigos de nuestros violentos tiempos.

Las actuaciones de Allá en San Fernando son sólidas, y a la vez esenciales para entender el dilema interno de los seres humanos y sus circunstancias. Las emociones se suceden y el mensaje llega claro al público de manera vertiginosa. Paula Aguirre, Leslie Magdalena Holguín, Carolina Escrich, Claudia Urbano, José Rochel y Juanjo López han puesto en evidencia la complejidad de sus personajes, sus emociones y sus conflictos, pero al mismo tiempo se convierten en pilares del mensaje de una obra que invita a reflexionar sobre el tiempo que nos toca vivir.

 

Fernando Olszanski, escritor, editor y artista visual, su último libro es titulado Rojo sobre blanco y otros relatos, reside en Chicago.

Allá en San Fernando hasta el 30 de octubre
Citlalin Gallery, 2005 S. Blue Island Avenue